Trabajo Directo con Los Pobres
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| Padre Josemaría, celebrando la Santa Misa en una aldea. |
Nuestra primera misión apostólica es servir los
materialmente pobres, sobre todo los indigentes y sin hogar. Cada convento debe tener una o más apostolado para prever
las necesidades de los pobres, por ejemplo, un albergue, comedor, entrega de provisiones y/o ropa. Cada una de estas obras debe ser dirigida por
un fraile para preservar el carácter católico y franciscano. Cada miembro de la
comunidad debe ser personalmente y directamente involucrado en el trabajo con los pobres. Todas las ayudas a los pobres se dan de una forma totalmente gratuita.
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| Padre Francisco, visitando la casa de una familia. |
“La búsqueda
de la belleza divina mueve a las personas consagradas a velar por la imagen
divina deformada en los rostros desfigurados por el hambre, rostros
desilusionados por promesas políticas; rostros humillados de quien ve
despreciada su propia cultura; rostros aterrorizados por la violencia diaria e
indiscriminada; rostros angustiados de menores; rostros de mujeres ofendidas y
humilladas; rostros cansados de emigrantes que no encuentran digna acogida;
rostros de ancianos sin las mínimas condiciones para una vida digna. La vida consagrada muestra de este modo, con
la elocuencia de las obras, que la caridad divina es fundamento y estímulo del
amor gratuito y operante.”
-
Papa
San Juan Pablo II, Vita Consecrata, 75
“Todos los hermanos deben
gozarse cuando conviven con personas de baja condición y despreciadas, con los
pobres y débiles y enfermos y leprosos y con los mendigos de los caminos.”
- San
Francisco, Primera Regla IX, 1-5
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| Fray Gabriel Emmanuel, enseñando los niños a orar. |
Apostolados que nos tocan:
Centro Médico San Benito
José | Misiones de Aldeas | Casa Guadalupe | El Cenáculo - Comedor | Hogar Nazareth | La Granja |
Capellanía Hospitalaria | Ministerio de Prisión | Albergue San Antonio | Casa
Juan Diego | Centro Juvenil San Francisco | Pro-Vida
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