El Reino de la Verdad
Es apropiado que este fin de la semana,
cuando estamos celebrando la fiesta de Jesucristo, el Rey del Universo, estamos
ayudando en un retiro llamado “La Libertad” (o también “Desatado”). Es basado en un método de la liberación
interior desarrollado por Neal y Janet Lozano, en ingles llamado
“Unbound.” Es un proceso de 5 pasos o
llaves, los del arrepentimiento, del perdón a otros, de la renuncia, de la
autoridad, y de la bendición del Padre.
En este contexto, la celebración del Reino
de Cristo es más clara. Es un reino
interior más que todo, y es un reino de la verdad, la verdad que nos hace
libres. El reino del Señor nos hace libre contra la esclavitud de las mentiras
y poder del enemigo, el diablo, y del egoísmo.
Al terminar el año litúrgico y para entrar
en un nuevo año de la iglesia, el año de la misericordia, es un buen tiempo para
preguntarnos, ¿Cuáles son las mentiras del enemigo que escucho con frecuencia? He aquí
algunos ejemplos:
“-Nunca llegará yo a nada.
Soy un fracaso.”
“-Siempre es mi culpa. La
enfermedad o muerte o abuso o adicción de mi madre/padre/hermano, etc., es
culpa mía.”
“-Soy feo/fea.”
“-Dios no me puede ayudar. No
puedo cambiar mi vida ni mis hábitos.”
“- Dios quiere castigarme. Mi
vida está condenada.”
“-Dios no me puede perdonar.
Dios no podría amarme.”
“-No puedo escuchar al Señor.
Dios no quiere hablar conmigo.”
“-Tengo que hacerlo todo yo mismo – Nadie puede ayudarme.”
Cuando escuchemos estas mentiras u otras tentaciones similares del
enemigo, tenemos que renunciarlas en el nombre de Cristo, con confianza que Él
tiene las palabras de la vida y la verdad.
Con confianza y humildad, le pedimos al Señor que El meta estas mentiras
en sus llagas sagradas y también que Él nos hable la verdad en nuestros
corazones.
Es muy útil seguir los otros pasos del arrepentimiento, autoridad,
perdonar, y la bendición del Padre también, para encontrar la libertad del
reino de Dios. Se puede leer más sobre
estas llaves en el sitio de red www.heartofthefather.com
.
Por favor, ruega por los jóvenes que están en este retiro con
nosotros aquí en Comayagua, que ellos puedan perseverar en la nueva libertad
que encuentren en el Señor Jesucristo, el Rey del Universo.
¡Viva el Cristo Rey!
P. Ricardo, CFR